Atrasado fideicomiso para Reventazón
Fondo para megaplanta eléctrica sería de $670 millones
El fideicomiso mediante el cual se financiará y construirá gran parte del proyecto hidroeléctrico Reventazón está atrasado.
La promesa original era que estaría listo para principios de este año, pero a la fecha aún se trabaja en eso.
Mediante el fideicomiso se busca conseguir $670 millones de los más de $1.300 millones que costará la planta eléctrica.
Reventazón será una central de 305 megavatios de capacidad y surge como el salvavidas para evitar apagones a futuro.
La demora se da porque el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) se está tomando su tiempo para definir la estructura del plan.
Pese a ello, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) apura el paso para definir los bancos que nutrirán el fideicomiso.
No obstante el BID deberá esperar a que el ICE le indique cómo quedará el fideicomiso para darle contenido económico.
El propio BID, la Corporación Financiera Internacional y bancos locales han mostrado interés en aportar recursos para el proyecto.
Una vez que se tenga listo el plan de financiamiento, entrará a escena el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
A este banco le corresponderá administrar el fideicomiso, así como construir y operar la planta eléctrica.
La energía que produzca con Reventazón, el BCIE se la venderá al ICE y con ese dinero se pagará a quienes participen en el fideicomiso.
Una vez que venza el contrato, el proyecto se convertirá en un bien del Instituto eléctrico estatal.
En noviembre Gravin Mayorga, gerente de Electricidad del ICE, prometió que el fideicomiso estaría listo en enero pasado.
Sin embargo, el BID confirmó recientemente que el ICE aún se encuentra en la estructuración del fideicomiso.
Las nuevas estimaciones apuntan a que el plan mediante el cual se financiará la planta eléctrica podría ir saliendo en el segundo semestre de este año.
Se intentó conocer las razones por las que no se tiene listo el fideicomiso, pero no hubo respuesta.
Ello a pesar de que desde hace más de un mes se le pidió a la oficina de Prensa del ICE una entrevista con un representante del sector eléctrico, pero al cierre de edición no se nos había atendido.
Luis Roberto Rodríguez, director del proyecto, tampoco nos respondió las consultas pues en su oficina se nos remitió con el departamento de Prensa del ICE.
Pese al atraso del fideicomiso, en el Instituto eléctrico han venido defendiendo que Reventazón no sufrirá atrasos.
La planta está en construcción desde abril de 2010 y todo se ha financiado con fondos propios del ICE.
Está previsto que comience a funcionar en el verano de 2016. Hoy registra un avance del 40%, según el ICE.
Cuando entre a operar, Reventazón pasará a ser la obra hidroeléctrica más importante de Centroamérica.
Con 305 megavatios (MW) de potencia, desplazará a las plantas El Cajón, de Honduras y Fortuna en Panamá, que son las más grandes hasta ahora.
La potencia de Reventazón será suficiente para abastecer de manera simultánea la demanda de 525 mil hogares.
Eso es más o menos la cantidad de viviendas que hay en San José, Cartago y Heredia juntas, según el censo de población vigente.
Reventazón marcará un desafío para el ICE por sus dimensiones. La presa medirá 130 metros de alto y 527 de ancho.
El embalse, a su vez, abarcará un área de 7 kilómetros cuadrados, y tendrá la capacidad de almacenar 118 millones de metros cúbicos de agua.
La promesa original era que estaría listo para principios de este año, pero a la fecha aún se trabaja en eso.
Mediante el fideicomiso se busca conseguir $670 millones de los más de $1.300 millones que costará la planta eléctrica.
Reventazón será una central de 305 megavatios de capacidad y surge como el salvavidas para evitar apagones a futuro.
La demora se da porque el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) se está tomando su tiempo para definir la estructura del plan.
Pese a ello, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) apura el paso para definir los bancos que nutrirán el fideicomiso.
No obstante el BID deberá esperar a que el ICE le indique cómo quedará el fideicomiso para darle contenido económico.
El propio BID, la Corporación Financiera Internacional y bancos locales han mostrado interés en aportar recursos para el proyecto.
Una vez que se tenga listo el plan de financiamiento, entrará a escena el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
A este banco le corresponderá administrar el fideicomiso, así como construir y operar la planta eléctrica.
La energía que produzca con Reventazón, el BCIE se la venderá al ICE y con ese dinero se pagará a quienes participen en el fideicomiso.
Una vez que venza el contrato, el proyecto se convertirá en un bien del Instituto eléctrico estatal.
En noviembre Gravin Mayorga, gerente de Electricidad del ICE, prometió que el fideicomiso estaría listo en enero pasado.
Sin embargo, el BID confirmó recientemente que el ICE aún se encuentra en la estructuración del fideicomiso.
Las nuevas estimaciones apuntan a que el plan mediante el cual se financiará la planta eléctrica podría ir saliendo en el segundo semestre de este año.
Se intentó conocer las razones por las que no se tiene listo el fideicomiso, pero no hubo respuesta.
Ello a pesar de que desde hace más de un mes se le pidió a la oficina de Prensa del ICE una entrevista con un representante del sector eléctrico, pero al cierre de edición no se nos había atendido.
Luis Roberto Rodríguez, director del proyecto, tampoco nos respondió las consultas pues en su oficina se nos remitió con el departamento de Prensa del ICE.
Pese al atraso del fideicomiso, en el Instituto eléctrico han venido defendiendo que Reventazón no sufrirá atrasos.
La planta está en construcción desde abril de 2010 y todo se ha financiado con fondos propios del ICE.
Está previsto que comience a funcionar en el verano de 2016. Hoy registra un avance del 40%, según el ICE.
Cuando entre a operar, Reventazón pasará a ser la obra hidroeléctrica más importante de Centroamérica.
Con 305 megavatios (MW) de potencia, desplazará a las plantas El Cajón, de Honduras y Fortuna en Panamá, que son las más grandes hasta ahora.
La potencia de Reventazón será suficiente para abastecer de manera simultánea la demanda de 525 mil hogares.
Eso es más o menos la cantidad de viviendas que hay en San José, Cartago y Heredia juntas, según el censo de población vigente.
Reventazón marcará un desafío para el ICE por sus dimensiones. La presa medirá 130 metros de alto y 527 de ancho.
El embalse, a su vez, abarcará un área de 7 kilómetros cuadrados, y tendrá la capacidad de almacenar 118 millones de metros cúbicos de agua.
Danny Canales
dcanales@larepublica.net
No hay comentarios:
Publicar un comentario